top of page

Noé Lima #1

  • Writer: #ObraEmergente
    #ObraEmergente
  • Oct 26, 2018
  • 5 min read

AHED TAMIMI


Halamish es una oruga de arcilla

Luminosa como el nacionalismo

De cuatrocientos cincuenta voces alzadas ante la saliva milenaria de la arena

Del intacto bostezo de la tinta del burócrata

De la madeja de las fronteras asilando el sudor de todos los presos

Que huyen del azafrán borracho por el viento

Ese manchado pulmón que grita por todos los niños muertos

Ahed Tamimi

Las nubes judías son monos vestidos de ceniza

No debes de temer al grito de la montaña helada

De la ardiente cuchara de la luna

Cuando se retuerce entre las olas el lamento de los asesinados

Y el perfume de las mujeres de Nabi Salih

Las vestidas de aguardiente por el amianto del abrazo menguante de la noche

Ahed

El eclipse del mármol es un puño cerrado en las fosas comunes

Con sus heladas voces que dicen lentamente libertad bajo las piedras.



ADN


Nunca tuvo un nombre

Ni la brisa de plata entre los dientes a la hora de la muerte

Ni la pulverizada nieve suspendida en el arpegio de la lengua

Cuando se grita

O se pide clemencia

Cuando el gallo canta su telaraña de agua en pleno mes de agosto

Cuando caen los balazos en la carne

Nunca lo tuvo al lado de su tatuaje

Ni del cañaveral masticado por el aire

Ni por el zumbido del insecto que mide la longitud de las estrellas

El oxígeno del caballo devorado por el aire menguante

Que muerde la encalada edad del frío

De la tumba

Del equilibrio de la pólvora alojada en el pecho

No tener un nombre es común en mi país

Es tener bajo la sombra las lágrimas que se han derramado con los años

Solamente la tierra puede recordar nuestras canciones

Esos trozos de gemidos que se guardan en los poros

Después de que el relámpago desnuda a los árboles con la lluvia

Ella puede recordar ese nombre

Con la claridad de los huesos

Que miden la temperatura celeste del mármol

Cuando la luna llena es una moneda aplastada por el tiempo

Ella si puede

Hacer recordarte cuando mueres

Cómo tiemblan las articulaciones del paisaje cuando gritas.



ANDRÓMEDA


Andrómeda es el agua oscura de la noche

La vela parda que alumbra la mojada mancha del rocío

Lo hace porque es de carne

Y talla la cumbre de la mejilla

La lengua de piedra del amanecer cuando canta

Al contorno que gime el confín de plata

Cuando la oscuridad cincela la sepultura de la rosa

El sembrado eco del beso sobre la piel del papel

El naufragio de la espada deshojada del invierno

Si las palabras fuesen plazas vacías para abarcarla

Alrededor de ella crece el silencio

Ve como el mar suspira el polvo ajado del sollozo

Cuando el afilado insomnio marca sus bocanadas heridas en la copa de los bosques

Andrómeda repica el amanecer en la boca

Como un lunar de arena

Es una máscara de sal en el contorno del paisaje

Repica y lo hace mientras me observa

O mira mis poros de yeso deshechos por la luna

Andrómeda es la escarcha de ese eclipse que siempre se besa

Es el tatuaje del sol sobre la nieve

Y que acaricio en secreto

Con el temblor de mi mano para convertirlo en neblina.



BALADA PARA NORMA JEANE BAKER


El dentado esqueleto de la niebla

Oh Norma Jeane

Donde Júpiter orina a los gallos cuando se lamentan

Con sus rostros de talco

-Si podemos decir eso de la luna cuando la tierra gira-

Apenas te nombran

Con un aplauso de paloma ajada

Para recordar tu látigo rubio punzante como alfiler

Lo que ha quedado en la tumba

-La tuya-

Tu cabello con olor a lavanda

El encalado minutero que no se detiene

Con el apellido de tu abuela

La película de tus tetas al borde de ese silencio

Que pesa como un toro azul en pleno verano

El alba de salitre que navega en tu clítoris

Marchito como el desierto en el centro de los girasoles

Que anuncian la llegada del deseo con tus gemidos

Tu fémur que antes cruzó la frontera del azar en cada invierno

Oh Norma Jeane

Nervioso torso de nube

Puente entre la rosa y el plumero de la arena vestida de novia muerta

Temblor del agua ardiente en las cantinas del tercer mundo

Mano machacada de tanto masturbar a las penas

-Las mías y de mis amigos-

Oh Norma Jeane

Sálvame del chirriar celeste del agua

De las mariposas de tabaco que delatan mi ansiedad en los bares

Donde cuelga tu rostro amarillo como el whisky

Y al lado del poniente

El eco de tus manos pidiendo amor

A lo lejos como llamando también a la muerte

La mía.



EDITH PIAF


La luz de los faroles es un manómetro desnudo para medir el plateado pulso al mar de Normandía

Esa caja mecánica para nacer en la rueda de la fortuna

Para morir o nacer

Edith

Mientras tu padre mide al hígado la fórmula de los caballos

Para galopar hasta donde la helada muerte tensa nuestros ojos

Mientras vos nacías como una luciérnaga hinchada por el frío

O por el hambre alborotada como una abeja en el estómago de tu madre

O el de las putas del barrio

Cada una con su máscara de cenicienta con su arteria de concha

Su piel de catedral de musgo donde se trepa ligeramente con la sal del medio día

Esa vela desgarrada donde los rezos no sirven de nada

Naciste con la ortiga azul del invierno cosido al paisaje roto por el humo de los fusiles

Con una bolsa menguante quizás en la espalda

Con la voz temblorosa de los bares

Donde los hombres son pequeños astros destripados en la barra

Con cada quemadura de cigarrillo como una escalera de llagas cuando la palabra amor

Es una áspera ojiva en la lengua donde manan delgadas rosas

Cuántos lloraron con tus canciones

De pergamino gastado por las cicatrices

Cuántos besaron tus caricias de agua con la boca de níquel en cada trago

Cuántos buscaron sirenas deslumbradas por la misma luz de los faroles

Donde naciste para bucear en la lágrima degollada de cada mejilla

Trozo de aluminio

Brisa de talco para guardarla en el ojo

Bajo la carpa del circo quizás

Edith

Canta como una baba que trepa a los cielos como una huella del alba

Y que tiembla como una almena quebrada por el llanto

Que imagino con la luz de los parques como un anillo en vigilia

Ese fósil que solloza para anclar la ceniza de los calendarios.



EL DIABLO


Cómo empezó la luna deshojada a tener alas

Labios amantes que graznan el escupitajo del cuervo

Y que se apaga como una mosca en el momento de morir

Como el ronroneo de la página que lame al silencio

El afilado ojo como una bóveda celeste

Donde crece el feto del rocío

El astro desolado de la carne cuando se hunden las palabras

En una grieta espesa donde la luz lluviosa canta jazmines

Eso es el diablo

Y empezó a caer

Lentamente en el ajado papel

En la tatuada pluma que yace en el pozo estelar

Donde podemos hundirnos

Destazarnos

Como luminosas piedras rodando en el fondo de los ríos

Lo hizo con sus vapores en llamas

Como la llaga que se inflama en el poniente

Donde el desvelo puede quemarnos

El diablo tiene una semilla parecida a un grano de arena

Emocionante como una nube de verano

Como el tranquilo polvo que besan las caracolas

El diablo tiene una cintura de piedra

Una llaga que llora a la muerte cuando la desnuda

Como al claro cuchillo de las mañanas

Eso es el diablo

Un gorrión que zurce los párpados al frío

II

El diablo puede asesinarte

De reojo

Como el piropo del fuego que calca una bala en la nuca

Lo hace y las palabras terminan como un rojo charco

Donde el gemido es la parábola de dios en las aceras

O en la alcoba

Donde la muerte es una sorda aldaba

Que pesa con el tamaño de los huesos

 
 
 

Recent Posts

See All
DATOS

cerca de 24 mil personas mueren por hambre al día en este mundo que llamamos Tierra Cerca de 16 mil son niños menores de 5 años en esta...

 
 
 

Comentarios


© 2023 by Name of Site. Proudly created with Wix.com

bottom of page